Te suceden cosas después de las cuales ya no eres la misma. Ni mejor ni peor, otra nueva versión de ti. Afecta por dentro y por fuera. Normalmente sale por los ojos y se plasma en la serenidad en el rostro y en los gestos. Tengo muchos amigos que, a pesar de nuestras edades, siguen creciendo. No importa el paso del tiempo, incluso ahora son más guapos que cuando los conocí. Hay un grupo de seres que tira de los otros; sus ganas de ser su mejor versión crea tendencia y arrastra al resto a buscar en ellos mismos. Yo tengo que reconocer que siempre he estado en búsqueda y eso nos une fuertemente. De ellos aprendo, recibo cariño, ideas y mucha aceptación. Son personas positivas que dan sin saberlo. Cuando estás con ellos sabe a poco y a mucho a la vez.
Amigos
que te miran a los ojos y que escuchan con paciencia y atención lo
que quieres compartir. Amigos que respetan tus silencios tanto como
tus palabras. Que no se meten donde no les llaman y no te enjuician.
Amigos que creen en ti y se abren de par en par para que veas que no
hay trampa ni cartón. Son así, sin más.
Ellos saben quiénes son y quiero seguir creciendo a su lado. Hasta
que nos hagamos viejitos por fuera pero disfrutadores por dentro.
Gracias por hacerme un sitio en vuestros corazones llenos de amor infinito.
Gracias por hacerme un sitio en vuestros corazones llenos de amor infinito.